
Cuando estamos enamorados tenemos tendencia a la fidelidad; deseamos ser fieles y anhelamos que nuestra pareja también lo sea. Muchas parejas consideran que la fidelidad es un pilar fundamental para la estabilidad de su relación. Cuando la infidelidad es descubierta, la relación de pareja se tambalea y los sentimientos de confianza y seguridad emocional, dan paso a la desconfianza, inseguridad y la falta de credibilidad que nos inspira la persona infiel. Una vez que descubrimos la infidelidad de nuestra pareja, aunque perdonemos el hecho en sí, la desconfianza es el sentimiento que más perdura y más estragos causa en la relación.
Cuando nos percatamos de la infidelidad, nos sentimos víctimas del engaño y comprobamos que nuestra pareja ha roto un pacto de lealtad. En esta situación, pensamos que ya nada podrá volver a ser lo mismo con nuestra pareja, que no podremos recuperar la confianza perdida y sucumbimos víctimas de la inseguridad en un estado de duda continua. En muchas ocasiones la situación desemboca en una ruptura, la infidelidad sigue siendo- aún en nuestros días- la causa más frecuente de ruptura en una pareja. Los terapeutas de pareja constatamos que de todos los engaños o mentiras amorosas que pueden acontecer en una relación de pareja, la infidelidad es la que más estragos produce en la relación.
Diferentes reacciones
¿Cómo actúan las personas- que como tú- soportan la infidelidad de su pareja? Las personas reaccionamos de muy distintas formas ante el engaño de nuestra pareja. Mientras que para algunos, lo más sensato es cerrar los ojos y continuar como si nada hubiera pasado; para otros la ofensa se convierte en venganza y optan por devolver “la pelota” con otra infidelidad y entrar de esta forma en una situación de deterioro personal y de pareja.
Para muchos, la ruptura es la única salida a una relación de pareja que ya de ninguna manera son capaces de recuperar.
Lo más sensato en esta situación es afrontarla abiertamente con la pareja y con un planteamiento de solución de problemas tomar la decisión de salvar la pareja; o entrar en un proceso de ruptura. Por lo que nos transmites en tu mensaje vuestra decisión en un principio, fue dejar la relación; y posteriormente se produjo un cambio entre vosotros que os llevó a intentar olvidar lo que pasó- el episodio de infidelidad- y continuar juntos. La situación en la que ahora tú te encuentras es complicada; quieres olvidar lo que ha pasado pero…, no puedes dejar de pensar en el engaño y no confías en él cuando se relaciona con otras personas sin estar tú presente. Entiendo tu malestar y la dificultad que estás viviendo con tu pareja.
Olvidar el pasado es difícil...
... y tal vez no es posible con situaciones que han sido especialmente dolorosas para nosotros. Si olvidar- el hecho de la infidelidad- significa para vosotros, seguir con vuestra vida como si nada hubiera pasado, vuestra relación está en peligro, puesto que es imposible obviar algo que ha sido muy doloroso y seguir en una relación de pareja como si nada hubiera ocurrido. Para superar la desconfianza, inseguridad y los sentimientos de decepción que ocasiona la infidelidad, es importante que trabajéis juntos en pareja e intentéis dar solución a estos problemas. Lo importante es que habléis de lo que os está sucediendo ahora y busquéis soluciones positivas.
¿Qué hacer para que funcione?
¿Cuál fue la causa de que tú pareja fuera infiel? ¿Qué cosas podéis mejorar en vuestra relación? ¿Qué cambios podéis efectuar juntos para que la relación funcione? H abla con tu pareja de lo que te preocupa y de tus sentimientos y si la relación os merece al pena, trabajar juntos para superar los problemas. Evitar los problemas o negarlos- hacer como si todo siguiera igual que antes de la infidelidad- no es una buena estrategia para salvar vuestra relación. Afrontar juntos lo que os ha ocurrido y buscar soluciones para los problemas que ha ocasionado la infidelidad os dará una oportunidad de cambio y mejora de vuestra relación. Si las cosas no se resuelven de forma positiva para vosotros, siempre tendrás abierta la posibilidad de una ruptura. Lo importante es que una relación de pareja nos aporte cosas positivas, que no dañe nuestra autoestima, ni sea una relación tóxica. Cuando las relaciones son dañinas, lo mejor es romper con ellas -aunque ello suponga dolor- y atravesar el proceso de duelo de una ruptura.
Buscar la ayuda de un terapeuta de pareja si consideráis que solos no sois capaces de abordar las dificultades.