Cierto es que casi todos los métodos existentes en la actualidad para el control de la natalidad son de consumo femenino. Anticonceptivos hormonales, mecánicos o definitivos han sido pensados sólo en función de que sean las mujeres quienes los utilicen por suponer que son las encargadas de la crianza. Sin embargo la participación del hombre ante la responsabilidad de la fertilidad comienza a tener importancia. Actualmente, las investigaciones se encaminan en la búsqueda de métodos en donde ellos también participen en la anticoncepción. Se habla que dentro de poco, así como la "píldora revolucionó" encontraremos en el mercado inyecciones y partillas para el consumo masculino.
Pero mientras esperamos, sólo se conoce un método quirúrgico para los hombres: la vasectomía.
¿Qué es la vasectomía?
La vasectomía es un procedimiento quirúrgico que secciona y obstruye los conductos deferentes (conductos que transportan a los espermatozoides). Se emplea como método desde hace más de 40 años.
Es fácil y rápido, además de no ser costoso. Los hombres quienes optan por este método pueden salir caminando del centro de salud en unas horas después de la intervención.
Entre los países que han optado más por la utilización de la vasectomía como método definitivo, encontramos a China, Reino Unido, Estados Unidos, Holanda, Canadá y la India. Por desgracia en Latinoamérica existe un bajo porcentaje de hombres quienes lo practican, aunque cada vez es mayor el número. Probablemente las ideas "machistas" en torno a la supuesta "virilidad" tienen mucho que ver.
¿Quiénes se deben practicar la vasectomía?
La vasectomía es un método permanente para el control de la fertilidad y una opción viable para las parejas que ya tienen el número de hijos que desean.
Aquellos hombres que deseen activamente en la anticoncepción.
Los varones que puedan transmitir enfermedades hereditarias de carácter dominante.
¿Cómo se realiza la cirugía? ¿Es peligroso y doloroso?
El proceso es sencillo. Se realiza en el consultorio del médico, dura de 15 a 30 minutos y se efectúa con anestesia local.
PROCESO
Mediante la palpación manual del saco escrotal (la piel que recubre a los testículos) se identifica y aísla el conducto deferente. Después se procede a la anestesia local.
Se realiza una pequeña incisión (aproximadamente de 10 milímetros) en el escroto, como a dos centímetros de la base del pene, para localizar el conducto deferente.
Cortado el conducto, los extremos deben ligarse, ya sea mediante electrofulguración (cauterizar), ligaduras o por aplicación de diminutas grapas.
Por último la incisión se cierra.
La vasectomía sin bisturí.
Por supuesto que los avances tecnológicos se han desarrollado a favor de realizar más sencillamente este proceso. La técnica que actualmente se utiliza en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y en otras instituciones de salud es la conocida como "vasectomía sin bisturí".
La vasectomía sin bisturí difiere del proceso anterior en que la incisión se hace con la punta de una pinza y se ligan los conductos deferentes. Como el orificio es muy pequeño no se necesita coser, sólo se cubre el orificio con una gasa.
Después de la intervención
Al término de la vasectomía, como se comentaba anteriormente, el paciente sale caminando del consultorio y puede reanudar su vida sexual a los cinco días de la intervención. Es importante que los primeros tres meses ó 20 eyaculaciones posteriores a la vasectomía, se utilice otro método para mayor seguridad, porque el semen durante este periodo podría contener algún espermatozoide.
La vasectomía NO PREVIENE de Infecciones de Transmisión Sexual como el VIH- SIDA. El hecho de no eyacular espermatozoides no garantiza no ser portador del virus o que no se puede transmitir. El virus se encuentra en los líquidos y no específicamente en el esperma.
Conclusión
La participación del hombre en la anticoncepción está tomando mejores rumbos a favor de la equidad de género. Su inclusión hará relaciones afectivas más comprometidas con la paternidad y la decisión de elegir cuántos y cuándo se desea procrear.
La vasectomía es un método fácil y económico, una buena decisión para parejas quienes ya tengan satisfecha su paternidad. No existe ningún cambio en la actividad sexual, más que la confianza de que ya no existe la posibilidad de un embarazo.
IMPORTANTE DE CONSIDERAR
La vasectomía NO produce alteraciones en el placer que experimenta el hombre en su vida sexual.
No provoca alteraciones en la eyaculación ni en la erección.
La cantidad de semen eyaculado no es significativamente menor, los espermatozoides y secreciones de epidídimo (red tubulas que se adhiere a la superficie anterior de cada testículo) representan sólo el 5% del líquido seminal, a penas una gota.
La vasectomía es un paso para las relaciones equitativas, en donde no sólo se comparta el placer sino la responsabilidad.