Ser capaz de expresar tus deseos y preferencias sexuales constituye un factor muy importante para tu satisfacción sexual. También poder compartir lo que nos preocupa o nos causa vergüenza o temor, ayuda a que nuestra pareja sea conocedora de nuestro “yo” sexual más intimo y actúe en consecuencia ayudándonos a superar nuestras inhibiciones y desbloqueando nuestro potencial de placer erótico.
Es difícil que la complicidad sexual entre dos personas pueda darse sin una comunicación sexual honesta y sincera. La sexualidad todavía en el siglo XXI, está rodeada de tabúes y mitos que nos dificultan comportarnos de forma libre, segura y responsable con nuestra pareja.
Muchas personas encuentran dificultades- tal como tú nos dices- en expresar sus deseos y guiar a su pareja para el encuentro con el placer. La incomunicación sexual es la mayor causa de insatisfacción sexual entre las parejas. El silencio, la falta de información y los prejuicios sexuales son un verdadero problema para el placer sexual.
A la mayoría de nosotros nos falta auténtica información sexual, lo cual se debe en buena medida a que es un tema muy íntimo. Disfrutar de una relación sexual satisfactoria con nuestra pareja no se consigue sin más, sino que supone un camino de descubrimientos en común. A menudo lo que esperamos de nuestro amante no tiene nada que ver con la realidad. Ese parece ser tu caso.
Podrías empezar a romper el hielo de vuestra comunicación íntima compartiendo información sexual de algún artículo o libro que trate de forma adecuada la sexualidad. Empieza comentando la importancia que tiene para los amantes el aprendizaje en común de habilidades que hagan del sexo en compañía una experiencia única.
Es importante que él se sienta relajado y no acusado o en guardia al hablar de sexualidad contigo. Tranquilízale y comenta que todos necesitamos aprender a conocernos sexualmente y que tu intención es compartir con él confidencias mutuas para mejorar vuestra vida sexual. Asegúrate que el ambiente es relajado y tenéis tiempo por delante para hablar cómodamente. Quizás ayude un poco de música en un lugar donde podáis estar juntos en privacidad. Establece un clima emocional cálido y tolerante con tu pareja, ninguna relación sexual puede crecer a menos que los dos estén abiertos a compartir experiencias y a valorarse mutuamente como amantes.
Clara y directa
Procura ser clara y directa cuando le expreses cómo te gusta ser acariciada, qué actividades y juegos sexuales son tus preferidos y qué estimulación necesitas para disfrutar. Cuanta más información específica y concreta le transmitas mejor estarás posibilitando que él pueda mejorar su actuación sexual. Si es necesario escribe en un papel qué es lo que te gustaría decir y léelo varias veces hasta que estés segura de poder transmitírselo sin dañarle pero de forma clara. Ser sincera no incluye criticar la torpeza o el desconocimiento sexual de la otra persona.
La sinceridad sexual sin delicadeza, es brutalidad. Como regla general, concéntrate más en lo que te gustaría que hiciese y en los comportamientos que puede mejorar, que en señalar lo que hace mal. No olvides escuchar lo que él también quiere compartir contigo, mantente atenta a sus sentimientos y valórale como amante. Se avanza más cuando sentimos que nuestra pareja nos considera especiales y valiosos, a pesar de nuestros fallos y equivocaciones
No hieras su autoestima
En general, suele funcionar imaginar cómo nos gustaría que abordara la otra persona el tema si la situación fuera al revés. Cambiar los papeles nos ayuda a ser más empáticos con las emociones de nuestra pareja. Es importante que no hieras su autoestima. Concéntrate en el presente de tus relaciones sexuales y en lo que juntos podéis conseguir sexualmente. El pasado ya no se puede modificar, olvídalo y construye tu presente sexual. Los buenos amantes necesitan práctica y aprendizaje, las habilidades sexuales no se improvisan, se aprenden con la experiencia. Esto no significa que nos convirtamos en un manual de técnicas ambulante...Con un pequeño esfuerzo y el tiempo adecuado para experimentar, no hay pareja que no pueda mejorar en el terreno sexual.
